Efectos de un programa de yoga de 6 meses sobre la función renal y la calidad de vida

 
 

El tratamiento de la enfermedad renal crónica se complica por muchos motivos, como la retención de líquidos, la anemia y los efectos en múltiples órganos del cuerpo. En la India, donde los tratamientos pueden ser demasiado caros y estar fuera del alcance de la mayoría de la población, muchos han confiado en el yoga como terapia alternativa.

El yoga se practica en la India desde hace miles de años e incluye cambios de actitud mental, dieta y la práctica de posturas específicas(asanas), respiración(pranayamas) y meditación. Los ejercicios y posturas del yoga se centran en el fortalecimiento y estiramiento de los músculos y en el aumento del riego sanguíneo.

El yoga está bien estudiado en la presión arterial alta y la diabetes

Muchas investigaciones han demostrado que el yoga puede tener un efecto beneficioso en las enfermedades cardiovasculares, la diabetes, el colesterol y el peso corporal. El yoga también se encuentra entre las terapias alternativas más estudiadas para el control de la presión arterial. En la actualidad, se calcula que al menos 15,8 millones de personas en Estados Unidos (el 6,9% de los estadounidenses) practican el yoga, que está siendo recomendado por los profesionales sanitarios estadounidenses como medio para mejorar la salud. Dado que tanto la diabetes como la hipertensión son causas importantes de enfermedad renal, los investigadores pensaron en estudiar los efectos del yoga en personas con enfermedad renal crónica.

Los investigadores estudian sus efectos en la enfermedad renal crónica

En la India, 54 personas con enfermedades renales crónicas participaron en un estudio, en el que la mitad de los participantes recibieron terapia de yoga, además de sus medicamentos para la presión arterial, diuréticos y diálisis. Se les observó y comparó con las 25 personas que no recibieron terapia de yoga. Después de que cuatro personas abandonaran el estudio, las 50 restantes fueron observadas y controladas durante 6 meses. Los participantes del grupo de yoga recibieron formación en posturas corporales específicas para los riñones, así como en técnicas de respiración, que se practicaron regularmente durante al menos 5 días a la semana durante 40-60 minutos al día. 

Resultados prometedores

Aunque no hubo diferencias significativas entre los dos grupos al inicio del estudio, después de seis meses el grupo de yoga presentó una reducción de la presión arterial, y la urea en sangre y la creatinina sérica tendían a ser más bajas que en el grupo que no practicaba yoga.

Los resultados de este estudio, de 6 meses de duración, demostraron los beneficios del yoga para mejorar la presión arterial y la función renal, y que las posturas y la meditación tienen un efecto tanto en los aspectos físicos como psicológicos de la vida con enfermedad renal crónica.

Fuente: 

Hagens M, et al. Medicina complementaria y alternativa basada en la evidencia 2013, Article ID 649836, 13 páginas http://dx.doi.org/10.1155/2013/649836


Más historias de Know Rare